11 de julio de 2014

Nunca es tarde si la música es buena

Hay dos discos de estos que se supone debería haber escuchado y escuché poquísimo en el momento en el que se editaron. Hoy, pasados los años, han venido a mí en distintos momentos de este primer semestre de 2014 para demostrar la máxima de que nunca es tarde si la música es buena.

Estos son los Lori Meyers de 2013, en 2005 no eran tantos.

Los Lori Meyers son de mi quinta y han crecido conmigo. Cuando Houston Party editó 'Viaje de estudios' yo ya lo había visto en algún concierto minúsculo cuando todavía tenían maqueta. En 2004 (creo que era ese año) teníamos veinte años y estábamos locos   haciendo honor a la antología poética de La Bella Varsovia que tanto he releído estos años  . Si 'Viaje de estudios' llegara a mí ahora, no hubiera significado lo que fue.

En fin, a 'Hostal Pimodan', un disco más complejo repleto de referencias y una obra cumbre de los últimos rescoldos del indie patrio, le eché poca cuenta. Y estos días, tras el concierto de Lori Meyers en Territorios, en donde nueve año después botamos como hace tiempo y pudimos percatarnos de que se han hecho mayores (como nosotros) y ya son una banda en mayúsculas; de esas que se enfrentan al directo de otra forma, levantando la cabeza más allá de la pedalera, decidí que quería escuchar el disco de la discordía entre Houston Party y la banda de Loja. Así 'Hostal Pimodan' ha sido una de los álbumes de mi verano tempranero.

Lori Meyers versionando 'La Caza' de Juan y Junior



Y la original:




Este disco se aleja del rollo guitarrero noventero (al que luego de la mano de Universal volverían haciéndolo muy bien) para adentrarse en el pop de corte clásico sesentero. Y lo mejor con la vista puesta en referencia nacionales como Los Brincos, Los Bravos o Los Ángeles. En 'Hostal Pimodan' hay surf, psicodelia, Beach Boys, y toda la tradición musical que en algún momento acapararon los Beatles, pero que muchos grupos llevaban desarrollando entre Inglaterra y EEUU. Canciones como 'El Mejor de sus Trabajos' o 'L A' bien merecen una escucha detallada.

Y aquí una lista de reproducción del disco en youtube: 








El otro disco en cuestión que no escuché en su momento y que ahora es disco de cabecera es el que fue proyecto paralelo de la ahora estrella de Artic Monkeys, Alex Turner con el vocalista de los Rascals, Miles Kane. The Last Shadow Puppets firmaron en 2007 con 'The Age of the understatement' la renovación del brit pop elevada a sus mejores cotas. Un álbum en el que se inspiraron en Bowie o Scott Walker y en el que cuentan con colaboraciones de lujo como Owen Pallet de Final Fantasy a las cuerdas junto a la Orquesta Metropolitana de Londres. Las canciones son elegantes, tienen un toque retro elegantón con todo el regusto al pop más sofisticado, melodramático y èpico de Gran Bretaña, por un lado, y la urgencia o la inmediatez del brit pop, por otro. Para mí es un disco de la primera década de los dosmiles que se me pasó por alto.




No hay comentarios: